Impacto profundo

Larrañaga y Lacalle se florearon en homenaje al fundador del Herrerismo

Media hora antes de que se concretara el homenaje a Luis Alberto de Herrera, convocado por su nieto Luis Alberto Lacalle (Unidad Nacional), su rival en la interna partidaria, Jorge Larrañaga (Alianza Nacional), anunciaba a la prensa su presencia en la ceremonia. “Queríamos generar un impacto importante, un acto de unidad”, explicó a la diaria el diputado Pablo Iturralde.

Los 50 años del fallecimiento de Herrera lograron en el Cementerio Central el “acto de unidad” que no consiguieron los 21 años del fallecimiento de Wilson Ferreira Aldunate. El 15 de marzo el Partido Nacional (PN) realizó dos actos conmemorativos de la figura de Ferreira Aldunate: Larrañaga encabezó el recordatorio en el Cementerio del Buceo, mientras que Lacalle hizo lo propio en el Platense Patín Club.

Pero con Herrera fue distinto. “Anoche [por el martes] Larrañaga llamó a todos los diputados y senadores [aliancistas] para decir que hoy debíamos estar presente”, confió a la diaria un diputado de ese sector, quien dijo desconocer cuándo fue avisado Lacalle de la decisión. Por su parte, el senador herrerista Gustavo Penadés aseguró en diálogo con la diaria que “ya hacía varios días que sabía”, aunque el extremo no había trascendido.

Penadés fue el principal orador del recordatario, y en su intervención destacó la trayectoria y el legado de Herrera para los blancos. Ninguno de los precandidatos hizo uso de la palabra en ese marco, aunque sí al finalizar el acto: ambos se pronunciaron por la “unidad partidaria”. El líder de Unidad Nacional sostuvo que en el partido no hay una lucha sino “una competencia entre amigos y compañeros que podemos tener matices de diferencias”. Y saludó la presencia de Larrañaga en la evocación a la figura histórica del herrerismo, al señalar que se trató de “un eslabón más en una buena relación personal y política”. “Me parece que es el gesto dentro del nacionalismo que apuesta a construir respuestas desde la actividad política y a superar un Uruguay del enfrentamiento, de la descalificación, del insulto, para advertir que el Partido Nacional es la esperanza”, sostuvo Larrañaga, quien reafirmó la idea al pronosticar que el 28 de junio concretarán el programa único del PN.

El líder aliancista aseguró haber llegado al Cementerio “inclinando nuestras banderas frente a Herrera”, algo que Lacalle no había hecho en el Buceo el mes pasado cuando el homenajeado fue Ferreira Aldunate. “El día de la conmemoración de la muerte de Wilson había que ir a la tumba.

Va en lo que cada uno quiera hacer. No parece de buena práctica ni de buena vecindad tomarle la figura al Herrerismo. Nosotros hicimos lo que teníamos que hacer: homenajear a un referente emblemático para el partido. No queríamos apoderarnos de su figura porque los homenajes también se hacen con las actitudes”, deslizó Iturralde. Al respecto, Penadés no quiso entrar en polémica y prefirió destacar la presencia de Larrañaga en cada 22 de julio, cuando se conmemora el nacimiento de Herrera, aunque también creyó conveniente recordar que no fueron invitados al homenaje de Ferreira Aldunate. “El de hoy [por ayer] fue un episodio muy importante porque se trata de 50 años

y lo importante es que el partido estuvo unido”, concluyó. ■ LR

Fuente: LA DIARIA, jueves 9 de abril de 2009