Asesores de los precandidatos debaten sobre crisis
Los economistas Fernando Lorenzo, Héctor Tajam, Javier de Haedo y Carlos Quijano dieron su visión sobre la crisis internacional y sus derivaciones en Uruguay, en una mesa redonda organizada por la corriente sindical Articulación, afín al gobierno, y la lista 98 del sindicato bancario AEBU.
Hubo coincidencias en la imprevisibilidad de la crisis internacional, su duración y alcance, y en que el sistema financiero uruguayo está mejor preparado para afrontar una crisis que en el año 2002.
Lorenzo, ex jefe de la Asesoría Macroeconómica del Ministerio de Economía y actual asesor de Danilo Astori, afirmó que por el momento "los efectos (de la crisis) se están manifestando concentrados en los sectores vinculados a las exportaciones". Desde el punto de vista financiero, afirmó que "empieza a ser importante que se reestablezcan las condiciones de acceso al crédito". Además, afirmó que la política económica debe hacer intervenciones "quirúrgicas". "Es muy importante distinguir entre los sectores que están enfrentando adversidades, cuáles de ellas provienen de la crisis, y por tanto son transitorias, y cuáles son dificultades estructurales en la economía".
Por su parte, el diputado Tajam, del Espacio 609, comparó esta crisis con el "efecto tequila" del año 95 en México, porque fue un impacto negativo del que Uruguay "se recuperó rápidamente, porque venía de un período de crecimiento". Además, subrayó la importancia de la banca pública en este escenario, "porque la banca privada extranjera no puede desligarse de lo que está sucediendo en su matriz".
De Haedo, referente económico del equipo de Jorge Larrañaga, afirmó que mientras que la parte de la población vinculada a la exportación y al agro ha sufrido la crisis, hay "otra parte de la población, urbana, que todavía no ha sentido los efectos". Explicó que esto es "en parte porque las políticas salariales (...) del segundo semestre del año pasado están alargando este período de bonanza. Pero va a haber un aterrizaje forzoso seguramente en los próximos meses". Afirmó también que "en la primera mitad del gobierno el shock externo positivo se utilizó positivamente para atenuar vulnerabilidades sociales, fiscales y financieras. (...) Pero en la segunda mitad se abusó de ese shock, se actuó como si fuera permanente y no hubo un comportamiento precautorio". "Esto significa que si el tanque estaba lleno para llegar a la próxima estación, se va a haber consumido antes de llegar. (...) Ahora se está llenando el tanque con asistencia de multilaterales" como el BID y el Banco Mundial. "En total son US$ 1.400 millones , que es una cifra muy parecida a los 4 puntos del PBI que va a haber de desvío fiscal en 2010".
Fuente: El País Digital, viernes 17 de abril de 2009
Hubo coincidencias en la imprevisibilidad de la crisis internacional, su duración y alcance, y en que el sistema financiero uruguayo está mejor preparado para afrontar una crisis que en el año 2002.
Lorenzo, ex jefe de la Asesoría Macroeconómica del Ministerio de Economía y actual asesor de Danilo Astori, afirmó que por el momento "los efectos (de la crisis) se están manifestando concentrados en los sectores vinculados a las exportaciones". Desde el punto de vista financiero, afirmó que "empieza a ser importante que se reestablezcan las condiciones de acceso al crédito". Además, afirmó que la política económica debe hacer intervenciones "quirúrgicas". "Es muy importante distinguir entre los sectores que están enfrentando adversidades, cuáles de ellas provienen de la crisis, y por tanto son transitorias, y cuáles son dificultades estructurales en la economía".
Por su parte, el diputado Tajam, del Espacio 609, comparó esta crisis con el "efecto tequila" del año 95 en México, porque fue un impacto negativo del que Uruguay "se recuperó rápidamente, porque venía de un período de crecimiento". Además, subrayó la importancia de la banca pública en este escenario, "porque la banca privada extranjera no puede desligarse de lo que está sucediendo en su matriz".
De Haedo, referente económico del equipo de Jorge Larrañaga, afirmó que mientras que la parte de la población vinculada a la exportación y al agro ha sufrido la crisis, hay "otra parte de la población, urbana, que todavía no ha sentido los efectos". Explicó que esto es "en parte porque las políticas salariales (...) del segundo semestre del año pasado están alargando este período de bonanza. Pero va a haber un aterrizaje forzoso seguramente en los próximos meses". Afirmó también que "en la primera mitad del gobierno el shock externo positivo se utilizó positivamente para atenuar vulnerabilidades sociales, fiscales y financieras. (...) Pero en la segunda mitad se abusó de ese shock, se actuó como si fuera permanente y no hubo un comportamiento precautorio". "Esto significa que si el tanque estaba lleno para llegar a la próxima estación, se va a haber consumido antes de llegar. (...) Ahora se está llenando el tanque con asistencia de multilaterales" como el BID y el Banco Mundial. "En total son US$ 1.400 millones , que es una cifra muy parecida a los 4 puntos del PBI que va a haber de desvío fiscal en 2010".
Fuente: El País Digital, viernes 17 de abril de 2009
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