Se anuncian grandes cambios en el gabinete del presidente Tabaré Vázquez. Se dice que Mariano Arana, Reinaldo Gargano, Danilo Astori y otros dejarían sus bancas en el gabinete ministerial para refrescar la imagen de un equipo que se encuentra cansado y con mucho desgaste.
Los últimos episodios que exhibieron la poca transparencia que existe en la administración de izquierda, que impidieron al gobierno exhibir sus exitosos números y los buenos resultados de las reformas introducidas, hacen imperioso que el gobierno haga un “refreshing” a su imagen pública.
Es que el Dr. Tabaré Vázquez se mantiene con popularidad alta y quienes han sufrido las consecuencias del desgaste son los “mandos medios”, es decir, muchos de quienes podrían haber aspirado a relevarlo en el mando.
Pero este será un año que exigirá extremar medidas porque la campaña electoral está acelerada. Desde el momento en que se empezó a hablar de la candidatura a la reelección del Dr. Vázquez se ha estado hablando de candidatos y, por ende, de postulaciones presidenciales. (Y tengamos en cuenta que primero fue el hermano y secretario de Vázquez quien habló de la reelección apenas había comenzado el gobierno de izquierda).
Así es que hemos tenido reeleccionistas y antireeleccionistas (y algunos de ellos han sido las dos cosas en los últimos meses) pujando dentro de una interna friccionada y, que por lo menos, se ha recalentado.
Hoy por hoy, sin embargo, son los blancos los que tienen el escenario más claro. Si no es porque ya tienen las candidaturas definidas, es porque lo harán en breve. La interna herrerista es la más encendida. El Dr. Luis Alberto Lacalle ha trabajado con un a intensidad prodigiosa, corriendo de atrás a quienes parecía que se disputaban el liderazgo y tal como están las cosas es posible que vuelva al ruedo electoral. Desde lejos, más calmado y esperando salir una vez los herreristas estén agotados, el Dr. Jorge Larrañaga ha anunciado su intención de renunciar a la presidencia del Directorio del Partido Nacional y en una posible fórmula con Francisco Gallinal espera posicionarse bien un un escenario que corre a favor suyo.
Éste será un año de definiciones y aquellos que aún esperan que un acto mágico les recupere deberán acelerar el tranco.
¿Cómo Se acomodará el gobierno que viene con problemas de equilibrios internos? ¿Qué hará el partido del gobierno, que parece no tener una fórmula para definir sus candidatos? ¿Qué harán los colorados, que de su estrategia dependerá en gran parte el resultado en el caso en que haya balotaje?
Son más las preguntas que las respuestas, aunque se acortan los plazos y cada uno deberá acelerar por su lado los procesos internos que terminen definiendo quiénes postularán para el año próximo.-
Columna semanal de Alberto Lamaita publicada en Diario El Heraldo del día 8 de enero de 2008
Los últimos episodios que exhibieron la poca transparencia que existe en la administración de izquierda, que impidieron al gobierno exhibir sus exitosos números y los buenos resultados de las reformas introducidas, hacen imperioso que el gobierno haga un “refreshing” a su imagen pública.
Es que el Dr. Tabaré Vázquez se mantiene con popularidad alta y quienes han sufrido las consecuencias del desgaste son los “mandos medios”, es decir, muchos de quienes podrían haber aspirado a relevarlo en el mando.
Pero este será un año que exigirá extremar medidas porque la campaña electoral está acelerada. Desde el momento en que se empezó a hablar de la candidatura a la reelección del Dr. Vázquez se ha estado hablando de candidatos y, por ende, de postulaciones presidenciales. (Y tengamos en cuenta que primero fue el hermano y secretario de Vázquez quien habló de la reelección apenas había comenzado el gobierno de izquierda).
Así es que hemos tenido reeleccionistas y antireeleccionistas (y algunos de ellos han sido las dos cosas en los últimos meses) pujando dentro de una interna friccionada y, que por lo menos, se ha recalentado.
Hoy por hoy, sin embargo, son los blancos los que tienen el escenario más claro. Si no es porque ya tienen las candidaturas definidas, es porque lo harán en breve. La interna herrerista es la más encendida. El Dr. Luis Alberto Lacalle ha trabajado con un a intensidad prodigiosa, corriendo de atrás a quienes parecía que se disputaban el liderazgo y tal como están las cosas es posible que vuelva al ruedo electoral. Desde lejos, más calmado y esperando salir una vez los herreristas estén agotados, el Dr. Jorge Larrañaga ha anunciado su intención de renunciar a la presidencia del Directorio del Partido Nacional y en una posible fórmula con Francisco Gallinal espera posicionarse bien un un escenario que corre a favor suyo.
Éste será un año de definiciones y aquellos que aún esperan que un acto mágico les recupere deberán acelerar el tranco.
¿Cómo Se acomodará el gobierno que viene con problemas de equilibrios internos? ¿Qué hará el partido del gobierno, que parece no tener una fórmula para definir sus candidatos? ¿Qué harán los colorados, que de su estrategia dependerá en gran parte el resultado en el caso en que haya balotaje?
Son más las preguntas que las respuestas, aunque se acortan los plazos y cada uno deberá acelerar por su lado los procesos internos que terminen definiendo quiénes postularán para el año próximo.-
Columna semanal de Alberto Lamaita publicada en Diario El Heraldo del día 8 de enero de 2008
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