sábado, 14 de febrero de 2009

‘Soy temperamental y a veces engrano porque me tomo las cosas con responsabilidad’.


1) ¿Se define “wilsonista”?

Sí, absolutamente. Nosotros somos blancos por haber estudiado la historia, por la herencia de nuestra familia, pero también por la influencia muy importante que Wilson ejerció en la política uruguaya. Yo tenía quince años cuando Wilson fue candidato en el 71, y realmente quedamos prendidos en nuestra condición nacionalista por todo el efecto fenomenal que Wilson creó en la política nacional.

2) En el Partido Nacional hoy son pocos los que no se reivindican wilsonistas.
Hoy todos reivindican a Wilson. El problema es cuánto del contenido de su discurso y su trayectoria termina aplicándose real y efectivamente en el acontecer político nacional.

3) ¿Por qué le dicen “guapo”?
Me dicen “guapo” desde muy chiquito. Prácticamente me crié en el Hipódromo San Félix de Paysandú, mi padre fue presidente fundador y toda la vida anduve en la vuelta de los patios de los studs de Paysandú. Ese hipódromo prácticamente lo hizo mi padre y yo fui creciendo con él, yo andaba permanentemente con los peones y cuidadores de caballos. Siempre andaba en alguna bandideada y dos por tres me ligaba alguna reprimenda y entonces me ponía en posición de pelea (levanta los puños) pronto para repeler lo que otros más grandes pretendían hacerme, y nunca le contaba al viejo. De ahí salió el mote de “guapo”. Después mi padre le puso a un caballo “El guapo” y se fue reafirmando esa característica.

4) Tuvo una “agarrada” famosa, siendo intendente de Paysandú, con algún funcionario municipal, ¿no?
No sé, pude haber tenido varias siendo intendente. En algún momento tuve alguna discusión muy fuerte con algún funcionario de Tambores, por motivos funcionales. Me vino a recriminar y hacerme partícipe de lo que yo consideraba era su propia omisión y tuvimos ahí un cruce, un entredicho. No soy fácil de arriar.

5) ¿Es de irse a las manos fácilmente?
No, no. Antes, cuando era más muchacho era más permeable a tener algún encontronazo, pero con el tiempo uno advierte que para poco sirve. Naturalmente soy una persona tremendamente temperamental. No puedo esconderme, soy temperamental y a veces engrano porque me tomo las cosas con enorme responsabilidad. Yo estaba siempre en primera fila de lo que significaba una obra o el impulso de un servicio, tenía una forma muy personal de seguir la ejecutoria municipal. Y eso lleva a que uno esté en primera fila y a recibir recriminaciones, pero andaba y ando para todos lados y nunca he tenido inconvenientes con la ciudadanía, porque tampoco acepto que se me exprese cualquier cosa. Puedo recibir imputaciones con respecto a lo bien o mal que actúo, pero no respecto a la moral o el honor.

6) ¿Qué hacía antes de llegar a la Intendencia de Paysandú en 1990?
Ejercía mi profesión de abogado. Yo no tengo fortuna personal ninguna.

7) ¿Dejó completamente de ejercer su profesión?
La dejé completamente, porque entendí que en un departamento chico no se pueden hacer dos cosas mal, hay que intentar hacer una regular. Y mucho menos desde mi condición de intendente, que la gente pudiera sospechar que podía derivar trabajo para mi estudio profesional. Cerré el estudio de más de treinta y cinco años que había recibido de mi padre.

8)¿Cómo le llegó la posibilidad de ser intendente?
Fue la coyuntura. Había una figura muy importante del Partido Colorado al frente de la Intendencia, como era el arquitecto Belvisi. Hubo varios candidatos en el Partido Nacional, y nosotros recibimos el apoyo de Por la Patria, nuestro sector, también del Movimiento Nacional de Rocha, de un sector del Herrerismo, del Movimiento Social Cristiano y resolvimos, junto a otros compañeros, disputar la elección. Ganamos al Partido Colorado por más de diez mil votos, fue una victoria estrepitosa.

9) ¿Cuánta gente hizo entrar en la Intendencia?
Muchísimos menos de los que se fueron. Entre las altas y las bajas logramos dejar la Intendencia, cuando nos fuimos, prácticamente con un quince por ciento menos de funcionarios.

10) ¿Le gustaría volver?
No. Considero que es una etapa que mucho aprecio y fue trascendente, que me costó enormes esfuerzos personales, que lo hicimos merced a un equipo de gente muy joven que estuvo con nosotros, pero sin renunciar a nada, estamos encaminados hacia otro sentido dentro de la actividad política nacional.

11) ¿Por qué ganó el Frente Amplio en Paysandú, en las elecciones de octubre de 1999?
Entre otras cosas por todo lo que significó el tema de la candidatura única para el Partido Nacional, que era el único partido que no estaba en condiciones de llevarla. Y mucho menos cuando esa candidatura era la del doctor Lacalle, que en Paysandú nunca ha podido tener -salvo en las elecciones de 89- una expresión política verdaderamente fuerte.

12) ¿Usted está actuando para que los votos nacionalistas que supuestamente fueron al Frente Amplio en 1999 vuelvan al partido?
Nosotros creemos estar jugando un doble papel: estamos haciendo de dique de contención para que muchos de los que están se queden, y estamos buscando que muchos de los que se fueron, retornen. Estamos convencidos que la próxima elección interna va a ser vital para el partido, va a marcar el tiempo del Partido Nacional que viene.

13) ¿Para eso usted tiene que convertirse en el ala izquierda del partido?
No. Como dijo Wilson, ni el ala izquierda ni el ala derecha, ser blancos. Nosotros tenemos que ser nacionalistas.

14) Pero los votos que se fueron, lo hicieron hacia la izquierda.
Se fueron a la izquierda porque quizás dentro del partido no se interpretaba el nacionalismo, la condición de blancos representada en los hechos, en las conductas, en las respuestas que el partido brindaba al país. Buscamos levantar lo que han sido banderas del Partido Nacional: el partido de la producción, del trabajo, de la descentralización, de las políticas sociales. Ese es el partido moderno que nosotros queremos para el país. El único partido que está en condiciones de renovarse es el Partido Nacional.

15) ¿Cómo juzga al gobierno del doctor Lacalle?
Fue un gobierno que tuvo muchos aspectos positivos, pero se perdió la oportunidad de haber sido un gobierno excelente, por un defecto que a mi juicio tuvo, que es la excesiva vanidad en alguno de sus integrantes que desplegaron la acción al frente de ese gobierno, con actitudes que muchas veces terminan siendo pagadas.

16) ¿Lacalle fue un buen presidente?
Yo creo que Lacalle… definamos qué es ser buen presidente. Yo creo que ser buen presidente significa muchas cosas. El ejerció la Presidencia con luces y con sombras, como toda gestión humana. Creo que muchos aspectos positivos de su gestión fueron opacados por directa responsabilidad de alguno de los integrantes de su gobierno, que no desplegaron su acción con la humildad que el ejercicio del gobierno supone. Y encima de ello algunos aspectos de corrupción que terminaron opacando. Esto no es nuevo, no estoy reeditando una polémica, usted verá que estoy deliberadamente estudiando los términos en los que quiero expresarme para no reeditar polémicas. El gobierno de Lacalle perdió la oportunidad de ser catalogado como muy bueno, por algunos aspectos que terminaron ensombreciéndolo.

17) ¿Cómo es su relación hoy con Juan Andrés Ramírez?
Buena. Yo tengo buena relación con todos dentro del Partido Nacional, incluso con el doctor Lacalle. Más allá de los cortocircuitos que a veces se generan y de las críticas a veces muy fuertes que yo le hago, tenemos buena relación. Y con el doctor Ramírez, yo dije que quizás terminamos separando nuestros destinos políticos simplemente por no haber dialogado más.

18) ¿Puede haber un nuevo acercamiento en el futuro?
En nosotros no hay ningún obstáculo para que ello no acontezca.

19) ¿De quién se siente más próximo hoy: de Ramírez o de Lacalle?
No, mire, yo me siento próximo de lo que piensa Alianza Nacional y creo muy fuertemente en lo que venimos haciendo. Podía decirle que me siento con mayor lejanía respecto del doctor Lacalle. Nos separan contenidos, estrategias y formas de actuar. En esta semana el doctor Lacalle protagonizó una entrevista con el Encuentro Progresista y nosotros nos preguntamos: ¿a título de qué lo hace? ¿A título de líder de un sector, de precandidato a la Presidencia por un sector del Partido Nacional o como presidente del directorio de todos los blancos? Esas son las cosas que nos van a llevar a nosotros a renunciar al directorio del partido, porque creemos que es incompatible nuestra aspiración de ser el candidato de todos los blancos y por ahora candidato de un sector, con la de integrante del directorio.

20) ¿Sueña con ser presidente?
Quisiera ser presidente, porque creo que hay que darle a este país respuestas más concretas y profundas.

21) ¿Va a ser precandidato en cualquier circunstancia?
Sí. Aspiramos no solamente a ser el candidato de todos los blancos, sino a ganar la elección al doctor Vázquez y al doctor Sanguinetti. No le quepa ninguna duda. No jugamos a boyar como un corcho.

22) Si perdiera la interna, ¿aceptaría ser vice en una fórmula con el doctor Lacalle?
Ese escenario no me lo planteo porque nosotros vamos a ganar.

23) ¿Volvería a hacer campaña por el doctor Batlle?
Con franqueza, no. Terminantemente no. Me siento frustrado por este gobierno.

24) ¿Lo defraudó?
Sí, me ha defraudado porque el doctor Batlle tuvo todo para lograr un real apoyo de los blancos y del país, para concretar un buen gobierno, y está terminando arrinconado y solo, sin ejecutividad, sin planes y sin respuestas y en el medio de un marco de soberbia.

25) ¿Qué le faltó?
Le faltó la inteligencia que la gente le atribuía y que lamentablemente demostró quizás no tener. No pudo armar un equipo estable ni las apoyaturas políticas para impulsar un proyecto. Si bien tuvo que enfrentar condiciones muy adversas, lo hizo de manera improvisada. Este gobierno solamente fue coherente en no tener ningún plan.

26) ¿Está arrepentido de haberlo apoyado?
Mire, de los arrepentimientos se sirve el Señor. Esa etapa no es posible retrotraerla. Nosotros creímos en ese camino, resulta que se decía que era uno de los grandes estadistas que el país podía tener, y lamentablemente terminó en un fracaso.

27) ¿A quién vota en una segunda vuelta entre los doctores Sanguinetti y Vázquez?
No voy a votar a ninguno porque a esa segunda vuelta vamos a llegar nosotros. Usted es el primer periodista que me hace esta pregunta, pero no va a ser el último. Entonces, para usted y para los que vengan, con todo afecto y con todo respeto les digo que no vamos a tener que hacer esa opción porque vamos a votar al Partido Nacional en la segunda vuelta, no me queda ninguna duda. El partido está segundo y va a ser el único que va a tener interna, en la que va a triunfar la renovación. Y como va a cundir dentro de la política uruguaya una “menemización”, tanto Sanguinetti como Lacalle van a recibir esos efectos rechazo al estilo Menem en Argentina, no le quepa la más mínima duda de que vamos a ganar.

28) Le cambio la pregunta: ¿de quién se siente más cerca hoy: de Vázquez o de Sanguinetti?
De ninguno. Me siento cerca de las ideas del nacionalismo que venimos practicando, el que nos legó Wilson y los mejores hombres que le dieron talento y viabilidad al pensamiento del Partido Nacional.

29) ¿Alguna vez lo quisieron sobornar?
No. En la Intendencia, no creo que nadie se hubiera animado porque en mi pueblo me conocen. Y acá en lo nacional, tampoco.

30) ¿Por qué ha hecho esa marcha a caballo hasta el lugar donde vivió Artigas en Paraguay?
Porque siento esa cultura de nuestras tradiciones y nuestra historia que forman parte, a mi. juicio, del ser nacional. ¿Qué seríamos como país sin el caballo, sin los gauchos? Siento un profundo amor hacia el caballo, siento un enorme respeto por la forma cultural de nuestros paisanos, de nuestros gauchos. Llegar a Paraguay a caballo después de veintitrés días de marcha y de recorrer mil doscientos ochenta quilómetros es algo para mi imborrable. Muchos han dicho que lo hago para rodearme de cierta aureola política. Que digan lo que quieran, nunca hago nada sin sentirlo. Por eso mientras tenga vida y pueda volear la pata de un caballo voy a hacer ese peregrinaje que inventamos en el 95 y se llama “El encuentro con el patriarca” y que consiste en ir desde Paysandú hasta la meseta de Artigas, a caballo.

31) ¿Tiene campo?
No. Mi padre tenía. Mi madre heredó y mi padre explotó un pedazo de campo en Algorta que después vendió y compró un pedacito más chico, de unas cuatrocientos y pico de hectáreas, sobre el río Queguay en el departamento de Paysandú.

32) ¿Es cierto que cuando estudiaba se escapaba de las clases para ir al Hipódromo?
Sí, sí, permanentemente. Yo estudiaba en la Facultad de Derecho y si un lunes tenía un examen, el domingo estaba igual en la tribuna del Hipódromo, estudiando entre carrera y carrera.

33) ¿Jugaba mucho?
No, no. Bueno, un estudiante que pueda jugar no es fácil.

34) ¿Qué le pareció el discurso de Fidel Castro en Buenos Aires?
Un discurso más de Fidel, de los tantos. No es una personalidad que me atraiga.

35) ¿De quién se siente más lejos: de Fidel o de Pinochet?
De ambos. Por distintos motivos me siento distante. Hay algo que los asimila: que en ninguno de los dos países, cuando uno está y el otro estuvo, hubo democracia.

36) ¿Si fuera brasileño hubiera votado a Lula?
Sí. Era el mejor candidato para regir los destinos del Brasil, sin lugar a dudas. Y si fuera argentino hubiera votado a Kirchner.

37) ¿Si fuera presidente hubiera ido a reunirse con George Bush en el momento en que lo hizo Batlie?
No, definitivamente no hubiera ido. Me parece que no era la oportunidad para entrevistarse con el presidente de los Estados Unidos.

38) ¿Aunque ello haya permitido destrabar el ingreso de nuestras carnes al mercado estadounidense?
No creo que eso haya permitido abrir el mercado de carnes. El mercado de carnes del Uruguay en los Estados Unidos se abrió porque tenemos derecho de que se abra. ¿Hasta cuándo vamos a seguir con barreras sanitarias, como el tema de la aftosa, si la aftosa no genera ningún problema para la salud humana? Es una barrera paraarancelaria vergonzosa, lamentable. Estados Unidos se equivoca brutalmente porque no cuida el patio de su casa. En el mundo siempre aparecerán situaciones de terrorismo, porque el peor terrorismo es el que genera la injusticia, la pobreza, la miseria y la desigualdad.

39) ¿Juan Carlos Blanco debería estar preso?
No creo. Esos hechos sucedieron hace ya bastantes años. No soy un especialista en materia jurídico penal, pero tampoco podemos seguir mirando hacia atrás.

40) Si volviera a comenzar su vida política, ¿qué cambiaría?
Creo que en líneas generales no cambiaría nada. Quizás en el detalle habría cosas a modificar o a corregir. Siempre uno comete errores. Ojalá pudiera girar la cinta hacia atrás y retrotraer ese pasado para ver si es posible transformar los errores en virtudes. Una enorme frustración que tengo es que en este país no haya habido un presidente como Wilson Ferreira. Muchas cosas no hubieran sucedido si Wilson hubiera ganado en el 71.

Gerardo Tagliaferro para Cronica

No hay comentarios: